Emprendedores colombianos retornados y venezolanos migrantes participaron de la feria “Cúcuta fortalecida, integrada y solidaria”: 120 micro empresarios presentaron sus productos, servicios y sellaron alianzas.
Negocios de panadería, repostería, comida rápida, elaboración de dulces, cocina saludable, calzado, confección, complementos, artesanías, y otros productos se exhibieron desde el jueves 19 al 21 de diciembre en la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero de Cúcuta.
Esta feria se efectuó gracias al apoyo de la Cámara de Comercio de Cúcuta y la Corporación Organización Minuto de Dios, Acdi/Voca y Usaid, entidades y organismos que desarrollan un trabajo de capacitación a emprendedores que llegaron a Colombia en búsqueda de una mejor calidad de vida.
La inversión fue de 450 millones de pesos, en la cual Acdi/Voca aportó 300 millones y el resto provino de la entidad cameral. Con estos recursos se busca beneficiar a los colombianos retornados, población migrante y colombianos cucuteños que acogen a estas familias.
Carolina Hernández, gerente de estructuración y gestión de proyectos de la Cámara de Comercio de Cúcuta, destacó que los emprendedores recibieron asesorías, capacitaciones, talleres, en estos temas: emprendimiento, costos, marketing, procesos; con la finalidad de fortalecer sus ideas de negocios o darle forma a la idea a sus emprendimientos.
Cada emprendedor recibió, además, apoyo psicosocial de Acdi/Voca a través del programa “Decido ser”, plan que busca empoderar a los emprendedores. A los participantes se les invitó a lograr sus metas y a pensar en «sí se puede iniciar una vida desde cero».
Hernández destacó que este programa comprende varias fases:
la primera: la caracterización del grupo, luego se llevó la fase de talleres y asesorías, actualmente están en la fase de dar a conocer sus emprendimientos, a través de esta feria.
Luego, desarrollan la etapa final, en la cual dotarán de insumos y maquinarias a los emprendedores que requieran de apoyo financiero para impulsar su negocio.
El proyecto termina en marzo de 2020 y se espera hacer una ampliación del proyecto para beneficiar a más personas.
María Cecilia: 50 años en Venezuela
María Cecilia González, retornada colombiana nació en Medellín, a los 20 años se fue a Venezuela y retornó a Colombia hace año y medio. Tiene un negocio de venta de pasteles, que se llama “Café Pastel». Vivió 50 años en Venezuela en Barquisimeto y hoy es una de las beneficiarias del programa “Cúcuta fortalecida, integrada y solidaria”.
«Estamos contentos con lo que hemos aprendido en la Cámara de Comercio, nos han enseñado a calcular los costos de nuestros productos, hemos tenido ayuda psicosocial, y nos han brindado un calor humano impresionante, que nos ha permitido seguir adelante”, dijo.
James fabrica jáquimas para ganado
James González retornado colombiano: nació en el Valle del Cauca y se crió en Bucaramanga. Partió hacia Venezuela a los 18 años: vivió en Arauca y trabajó como fotógrafo de Asociación Venezolana de Criadores de Ganado Cebú, Asocebú.
A los 59 años regresó a Cúcuta para empezar desde cero: tiene una micro empresa llamada Familia Vaquera, en la cual fabrica jáquimas para ganado, correas de cuero y cartucheras de tela.
Tiene nueve meses de haber retornado a Cúcuta y es otro beneficiario del programa. Señaló que aprendió mucho de las capacitaciones y de la ayuda psicosocial que le brindó la entidad cameral.
“Lamento no haber obtenido estas herramientas en Venezuela, cuando era próspera, ahora nos toca empezar desde cero, emprender aquí en Cúcuta no es imposible, pero si es muy cuesta arriba todo”, destacó.
Yeen Lauro creó “Maryeen Muñecas”
Yeen Lauro Ramírez es un emprendedor venezolano, que también mostró sus productos en la feria. Con 51 años y casado con Margarita Caballero, de Norte de Santander, llegó hace seis meses a Cúcuta: vienen de Barinas, en cuya ciudad se dedicaban al comercio.
Crearon una microempresa de artesanías llamada “Maryeen Muñecas” en la cual fabrica muñecas de trapo, peluches y confeccionan blue jeanes. Agradecieron a Cúcuta por haberlos recibido, y a la entidad cameral por las capacitaciones y talleres.
“Somos una familia muy humilde y estamos muy agradecidos por toda la ayuda que nos han dado las entidades para iniciar nuestro emprendimiento, hacemos nuestros productos a mano porque no tenemos maquinaria, esperamos dar a conocer nuestros productos e ir creciendo poco a poco”, destacó Yeen.
Arthur: «muchas instituciones nos han ayudado»
Arthur Nobre es otro beneficiario que llegó desde la Isla de Margarita a Cúcuta. Decidió crear una empresa de venta de comida rápida. Luego empezó a fabricar pan para hamburguesas con sabores y sin químicos.
“Llegar a Cúcuta a empezar desde cero no ha sido fácil, después de tener una vida tranquila en Venezuela y llegar aquí … a dormir en una colchoneta. Sin embargo, muchas instituciones nos han ayudado y gracias a ese apoyo hemos logrado emprender y seguir adelante”, precisó el joven de 34 años que llegó hace dos años en Cúcuta.
Por: Cenay Sánchez, corresponsal Cúcuta El Venezolano Colombia
